Un marcador fronterizo entre el pueblo fronterizo de Achterhoek de Dinxperlo y el pueblo vecino alemán de Suderwick. Debido al endurecimiento de la política alemana, a los holandeses ya no se les permite formalmente cruzar la frontera si no pueden demostrar de inmediato que han dado negativo en la prueba del virus corona. Las nuevas reglas de la corona alemana tienen un impacto significativo en los residentes ubicados directamente frente al pueblo vecino alemán de Suderwick. En realidad, son inviables.
Ya no se permite formalmente cruzar la calle entre las aldeas sin un resultado negativo en la prueba. También escenas extrañas el fin de semana pasado. Los automovilistas holandeses esperaban en fila en la gasolinera al otro lado de la frontera con Alemania. La prueba de corona negativa obligatoria para poder ingresar a Alemania provocó una gran afluencia de holandeses en las estaciones de servicio al otro lado de la frontera alemana.
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