Durante el Foro Mundial de Economía Circular celebrado en Bruselas, Vivianne Heijnen, ministra holandesa de Medio Ambiente, hizo un fuerte llamamiento a favor de un marco político europeo para hacer que la industria química sea más sostenible.
Este discurso marca un momento importante para el sector químico europeo y los esfuerzos más amplios para promover una economía sostenible en la UE. Heijnen enfatizó la necesidad de tomar medidas rápidas para realizar la transición de fuentes de carbono fósiles a fuentes de carbono sostenibles dentro de la industria química. Afirmó que esto es esencial para la competitividad del sector a largo plazo y para la transformación hacia una industria verdaderamente sostenible.
"Hemos elaborado junto con Francia, la República Checa e Irlanda una declaración conjunta sobre este importante tema", informó Heijnen. Más adelante durante el evento, esta declaración será presentada oficialmente a la Comisión Europea, representada por el Comisario Hoekstra.
La industria química desempeña un papel crucial a la hora de afrontar el cambio climático, reduciendo el consumo de materias primas y limitando la contaminación. Heijnen destacó el papel clave que puede desempeñar la industria, no sólo como parte del problema, sino también como parte de la solución. "El sector químico puede ser una fuerza impulsora para lograr los objetivos climáticos y de circularidad de la UE, y al mismo tiempo reducir nuestra dependencia de partes externas", dijo Heijnen.
Sin embargo, el sector enfrenta grandes desafíos. Los altos precios de la energía y las materias primas han hecho que el sector químico europeo sea menos competitivo. Esto ha provocado la deslocalización de actividades a países fuera de la UE, lo que puede tener consecuencias negativas para la economía europea. La importación de productos químicos que no cumplan las normas medioambientales y de seguridad de la UE podría suponer un grave revés para las ambiciones medioambientales de la UE.
El discurso de Heijnen enfatiza la urgencia y la importancia de la cooperación y la formulación de políticas europeas para garantizar una industria química moderna, globalmente competitiva y sostenible en Europa.
Para afrontar estos desafíos, Heijnen abogó por la creación de un marco político europeo. Este marco debería centrarse en la creación de mercados, la disponibilidad de carbono sostenible e instrumentos para fortalecer la posición competitiva de la industria química. "La creación de mercados es esencial para estimular tanto la demanda como la oferta de productos de carbono sostenibles", dijo Heijnen. Propuso establecer objetivos ambiciosos y alcanzables para el uso de carbono sostenible como materia prima en la industria química, lo que proporcionaría claridad y perspectiva al sector.
Además de la creación de mercados, es fundamental que se preste atención a la disponibilidad de carbono sostenible para ayudar a las empresas a realizar esta transición. Heijnen pidió una estrategia que optimice la producción y el uso de carbono sostenible en la UE, como parte de una política de bioeconomía más amplia de la UE y en línea con la Directiva de Residuos.
